Durante varias entradas, estaré analizando el peor desempeño boricua en la historia de un Mundial FIBA. En esta primera parte, me limitaré a ofrecer la producción ofensiva, con algunos comentarios. En entradas posteriores, y considerando otras variables, trataré de analizar y explicar los resultados del equipo.
Eficiencia ofensiva: Puerto Rico apenas tuvo una ofensiva mediocre, lo que resulta decepcionante, dado que históricamente los boricuas suelen destacarse por su poderosa capacidad anotadora.
Pace: Aunque por apenas algunas posesiones, Puerto Rico fue el equipo que mas rápido jugó en su grupo. En el caso de Paco Olmos, sorprende que un equipo suyo no haya jugado mas lento, dado que sus Cangrejeros de Santurce son el equipo que menos posesiones utiliza en el BSN. Por otro lado, Paco reconoce el estilo que mejor representa a los jugadores del equipo:
"A partir de ahí, creo que no debemos perder el juego puertorriqueño, un juego rápido y en transición; tenemos jugadores muy importantes para poder hacerlo,”

La mala noticia en los tiros de campo fueron los dobles: durante la fase de grupos, Puerto Rico tuvo el tercer peor porcentaje de dobles (42.6%) del Mundial, y fueron los peores de su grupo. Este fue el factor que mas contribuyó a la mediocre ofensiva boricua:
- El 60% de los tiros de campo de Puerto Rico fueron dobles;
- El 75% de los dobles boricuas se lanzaron en la pintura, donde encestaron el 46% de sus intentos (el promedio, al menos en la NBA, es alrededor de 53%);
- El 25% de los dobles boricuas fueron tiros a media distancia, donde encestaron el 32% de sus intentos (el promedio, al menos en la NBA, es alrededor de 43%).

Tov%: El otro problema de la ofensiva boricua fueron los errores. Aún siendo la ofensiva mas rápida, Puerto Rico fue el tercer equipo mas cuidadoso de su grupo. Por otro lado, las mejores ofensivas del Grupo B, Argentina y Grecia, fueron las que menos errores cometieron. La tabla de la derecha demuestra que los jugadores de la línea delantera fueron los menos cuidadosos con la bola.


En resumen, la ofensiva boricua apenas fue mediocre: principalmente, por no lograr encestar suficientes dobles, y en parte, por no ser cuidadosos con la bola.
En la próxima parte, analizaré el lado defensivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario